La OMS recomienda promover el trabajo sano y eliminar los factores de riesgo que puedan producir accidentes dentro del lugar laboral, mejorar las condiciones de los colaboradores y generar un buen ambiente.

Para garantizar la seguridad y salud se beben seguir los estándares internacionales como las OHSAS y las normas de cada país. Pero también, se deben registrar en una herramienta de gestión humana, los procedimientos respectivos y demostrar su cumplimiento ante los organismos reguladores y entes de inspección de trabajo. Además de cumplir con el deber de información y formación a los diferentes roles de tu organización.

Como lo señala la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo las empresas que cuiden de su personal demuestran su responsabilidad social, protege y mejora la imagen de su marca y contribuye a maximizar la productividad de sus trabajadores.

Ante los cambios constantes que viven las compañías, la Salud y Seguridad en el Trabajo permite conseguir mano de obra competente y saludable, reduce los costes y las interrupciones de la actividad, satisfacen las expectativas de los clientes y supone un incentivo para las personas que laboran en la organización. 

Para la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo una mala actuación en esta materia trae fuertes repercusiones. Los costes humanos y empresariales de una muerte por accidente de trabajo, un incendio grave o un proceso judicial son evidentes; un 60% de las empresas que sufren alteraciones de su actividad por más de nueve días tienen altas probabilidades de afrontar un desbalance financiero e incluso la quiebra.